El Éxito y la Felicidad
Muchas veces creemos que cuando alcancemos el éxito deseado lograremos ser felices, estar en paz, relajarnos tras tanto trabajo para obtener ese propósito, y realmente será cuando disfrutemos de lo alcanzado.
Sin embargo, observamos en muchas personas exitosas que no son felices, comprobamos en nuestra experiencia que cuando logramos ese objetivo que creíamos que sería el comienzo de una nueva etapa, tras el primer momento de euforia, seguimos insatisfechos, y nos proponemos nuevas metas que nos sumen de nuevo en la búsqueda sin descanso.
¿Qué ocurre para no estar nunca conformes?
Estamos haciendo depender nuestra felicidad de alcanzar un propósito, y confundimos el éxito con tener, lograr, alcanzar. En vez de ser, estar, sentir, desear.
Y para complicarlo más, mucha gente ni siquiera persigue lo que realmente quiere, a veces ni sabe lo que quiere. Se limita a imitar lo que “hay que hacer” para llegar a lo que otros consideran éxito y a pretender ser felices con lo que otros dicen serlo. No son sus objetivos, son los de otros.
¿En qué consiste entonces el éxito?
En vivir como uno es, valorar lo que uno tiene, seguir su propio camino, y ser consciente del valor del Aquí y Ahora. Se trata de estar presente en la vida, no posponer la vida y el disfrute a un futuro, que no se sabe cómo será ni si mis objetivos y deseos serán los mismos.
Ser conscientes de lo que sientes ahora, de cómo eres ahora, y de lo que tienes ahora. Porque nada nos garantiza que si alcanzamos lo que buscábamos, nos vayamos a sentir felices y plenos.
Si no disfrutas de lo que haces cada día, nada te garantiza que en un futuro, que es incierto, vayas a ser feliz.
¿Eso significa no tener metas, no ir a por lo que anhelo?
No, para nada. Tener objetivos y deseos de mejora es muy saludable, siempre que sean propios y que sean realistas. Es buscar mejorar uno mismo, no alcanzar lo que otros tienen, porque quizás eso para mi no suponga una mejoría, no me acerque a la felicidad.
Por lo tanto, hay que ser cautelosos con las comparaciones y las definiciones de qué es un éxito y qué me reporta felicidad.
Querer mejorar no significa no poder disfrutar de lo que ya se es o se tiene. El error en la ambición está en poner todo el disfrute en el futuro, cuando se alcancen los objetivos marcados, en lugar de disfrutar ya y que la felicidad no dependa de alcanzar o no ese “éxito”.
Porque si no se es capaz de disfrutar y valorar el presente, no se disfrutará el éxito. Por lo tanto, no lo será tanto. El éxito debe ser una consecuencia de la felicidad, no su causa. El éxito es una parte más de la felicidad, no lo que reporta la felicidad. Gracias a valorar el presente se puede obtener satisfacción de los éxitos, pero también de los pasos dados para alcanzarlos. Si no, sólo será un momento fugaz de alegría, seguido de nuevas metas que no disfrutar hasta alcanzar.
Cuando nuestras razones para cambiar o mejorar no son las adecuadas, da igual que lo logremos, no lo disfrutaremos. Si se busca cumplir estándares sociales, las expectativas de otros, demostrar, aparentar o agradar, renunciaremos a la felicidad.
¿En qué mides el éxito?
¿Cuánto te dura la felicidad al obtenerlo?
¿Cuánto te ha costado alcanzarlo? Dinero, salud, tiempo, disfrute, relaciones…
Lo que anhelas, ¿de verdad lo quieres en sí mismo o por lo que representa (estatus)? ¿Por la aceptación de los demás? ¿para impresionar a alguien? ¿para sentirte aprobad@ por tus padres?
Las cosas son el triple de caras si además de lo que cuestan económicamente, suponen sacrificios personales, laborales, de ocio, de amor propio, de valores … Hay veces que ganando menos se vive mejor, más en paz, se es más rico, se disfruta más, se siente mejor y más satisfecho. Teniendo menos “éxitos” se triunfa mucho más.
Realmente queriendo lo que se consigue, sintiendo propios los objetivos, sintiendo que es bueno para un@ mism@, y que lo mereces, lo quieres disfrutar, no porque lo necesites, es como se obtiene un verdadero éxito. Tenerlo te hará feliz pero ya lo eres. Ese objeto o ese puesto, o esa meta, no te va a dar la felicidad, es sólo un paso más en tu camino de autosatisfacción.
Así que, realmente, ¿qué es el éxito para ti?
¿Qué necesitas para sentirte exitos@ ya, aquí y ahora?